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En cuanto al crédito al Consumo, con mucho el principal tema de preocupación, el saldo de cartera vencida ha experimentado una reducción de alrededor de 42% en el último año (unos 16 mil millones de pesos). Es decir, representa toda la disminución de la cartera vencida del sistema y hasta contribuye a compensar la totalidad de los que han aumentado su monto en ese período, dejando un efecto neto de contracción de este rubro. Su ICV es de 5.87 a marzo de 2010, cifra elevada comparada con los otros segmentos, pero ciertamente mucho menos preocupante que el nivel de 8.66 que registraba todavía hace un año (Gráfica 14).

En este caso la trayectoria del índice refleja que las medidas correctivas fueron tomadas con anterioridad y están dando resultado. El hecho es que la forma de la “burbuja” tendría su máximo en mayo de 2009 y de ahí en adelante ha comenzado su desactivación. Pero eso no es todo, porque también al interior de este rubro hay diferencias notables. Los índices específicos por tipo de crédito ponen en evidencia esta circunstancia (Grafica 15).