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En este contexto, y no sin cierta sorpresa, la evolución de los Servicios Financieros refleja una condición muy favorable (Gráfica 1). De hecho, se mantiene prácticamente sin cambio como proporción del PIB total, lo que indica que la consolidación de este sector no resintió de manera particular el paso de la crisis financiera internacional. En perspectiva, podemos ver que desde 2004 el camino ha sido de un progresivo ascenso y esto debe ser visto como un doble logro. Por un lado refleja el avance en la bancarización de la economía (en lo que ésta contribuya), pero por el otro, también refleja un avance de la formalización en general, hecho que no debe pasar desapercibido.

En este anuario, el desempeño de la Banca, así como su contexto se referirán a lo ocurrido en la segunda mitad de 2009 y parte de 2010. La cobertura informativa de éste quedará limitada por el natural rezago en la disponibilidad de información. Pero creemos que aún cuando no tengamos datos más frescos, lo disponible alcanzará para presentar con fidelidad un panorama global, pero sobre todo, las principales tendencias en el sector, lo que en economía suele tener más relevancia que el dato puntual.

Economía 2009-2010

En esta ocasión el descenso de 6.54% en 2009 superó en intensidad la caída de 6.2% ocasionada por la crisis en 1995. Con ello, se presentó la contracción más grave en los últimos años, prácticamente desde que se tienen registros comparables. No obstante, debemos reiterar que la peor parte ha quedado atrás, y que, vista por su temporalidad, fue en el primer semestre de 2009 cuando se registraría el punto más intenso y a partir de ahí las cosas mejorarían sustancialmente. Incluso al inicio de 2010 ya podemos hablar de crecimiento (Gráfica 2).