Versión estenográfica
Acapulco, Gro., 24 de marzo de 2017


Luis Robles Miaja,
Conclusiones del día anterior


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- MAESTRO DE CEREMONIAS: Buenos días. Vamos a dar inicio a nuestra sesión con el video de la Asociación. (Proyección del video)

Nuestro agradecimiento a los patrocinadores Platinum, BBVA Bancomer, Citibanamex y Santander, y a los patrocinadores Oro, Banorte, HSBC y Huawei.

A continuación nuestro Presidente Luis Robles expondrá las conclusiones de la jornada de ayer.

Don Luis, adelante.

- LUIS ROBLES MIAJA: Muy buenos días a todos. Quisiera antes de hablar de algunas reflexiones que tengo que transmitirles del día de ayer, reconocer la presencia en este salón de don Miguel Mancera.

Don Miguel es uno de los forjadores de las instituciones a las que me refería en mi discurso del Banco de México, cuando, a pesar de que él es muy humilde y una persona extraordinaria, yo le reconozco que a él se debe la autonomía del Banco de México.

Don Miguel siempre lo niega, siempre me dice: "No, yo no hice nada", lo hizo el Presidente Salinas; pero en realidad todos sabemos, don Miguel, que usted fue el ideólogo, el promotor y en definitiva la persona que logró, por supuesto con el apoyo de las autoridades correspondientes, que el Banco de México sea hoy una entidad, y que realmente es una pieza angular de la estabilidad financiera de nuestro país.

Muchas gracias por todo lo que usted ha hecho por México, don Miguel.

Y a manera de conclusión y no pretendo de esta manera hacer un repaso de lo que se citó ayer, porque eso sería bastante aburrido, yo quisiera brevemente describir lo que en mi opinión es lo que en el fondo se transmitió de las diferentes ponencias del día de ayer.

En primer lugar, estamos viviendo un mundo que posiblemente está cambiando de rumbo, del mundo que nace de la Segunda Guerra Mundial bajo un principio claramente sostenido por una de las potencias de la democracia, economía de mercado, libertades, liberalismo, igualdad de oportunidades, equidad, que finalmente es la ideología que triunfó entre el polo opuesto, la Unión de Repúblicas Socialistas Soviética.

Entramos a una nueva era, una era multipolar, donde ya no una potencia o dos controlan el mundo; donde ya no, no era una lucha de ideologías, donde países de una ideología comunista empezaron a adoptar principios del otro polo, que era el polo de los Estados Unidos de América.

Esto ha venido transformándose, y yo me atrevería a decir que, a partir de septiembre 11, de los lamentables sucesos que ocurrieron en septiembre 11, viene una nueva, un choque a este mundo liberal, etc.

Y este choque ha venido generando diversas corrientes que ya no veías, por lo menos no con la intensidad que hoy vemos en el mundo, como son los fundamentalismos religiosos, que han generado tantas desgracias y tanto dolor a la humanidad, como son políticas xenofóbicas, en algunos casos que pretenden o están, inclusive, por esa xenofobia, por esos miedos, pretenden cambiar modelos de organización geopolítica, como son la Unión Europea; el resurgimiento de una potencia como China, que ha sido un imperio por muchos años, por cinco mil años, pero que hoy es, si no un imperio, sí, sin duda, uno de los polos sobre los cuales gira este mundo multipolar.

Esto genera muchos riesgos, genera, al mismo tiempo, oportunidades, y todo esto con un mundo que cambia a una velocidad no vista en el pasado.

No hay duda que la humanidad ha sufrido cambios en el pasado muy lentos, en el siglo XX muy dinámicos, pero, sin duda, en el siglo XXI estamos viendo cambios que realmente se suceden a una velocidad poco o nunca vista en la historia.

Y esto, sin duda alguna, trae muchas ventajas, hay que decirlo, la humanidad nunca había logrado los niveles de bienestar y desarrollo que hoy tiene, pero también genera riesgos. Y uno de esos riesgos son movimientos que, de alguna manera, apelan a los sentimientos de perdedores, de este modelo, porque sí hay perdedores; perdedores que lo son por negligencia de las instituciones, por problemáticas sociales muy particulares, inclusive por fallas del modelo y que de alguna manera son atraídos por mensajes de regreso a un pasado que se vende como falsamente mejor, y que sin duda no lo es.

Y este ha sido el mensaje central de la Convención. El día de hoy tenemos a grandes exponentes; tenemos, en primer lugar al doctor Hausmann, una persona muy reconocida a nivel global y, en particular, en Latinoamérica; tendremos la oportunidad de escuchar al doctor Rogoff, un gran académico también mundialmente reconocido; y, por supuesto, tendremos el privilegio de escuchar al General Colin Powell, que hoy nos acompaña en esa sesión también, que tuve la oportunidad de conversar ayer con él, iba a ser media hora y tardamos hora y media en la conversación algunos compañeros y yo con el General. Es un personaje de la historia moderna. Gracias por la conversación de ayer, General.

Y, bien, sin más porque quería dar una pequeña introducción, no quería dar otro discurso como el que di el primer día; sin más, yo le ruego al doctor Hausmann y a don Luis Niño de Rivera, nuestro querido vicepresidente, si pudieran proceder a desahogar su parte.

Muchas gracias.

- MAESTRO DE CEREMONIAS: quiero aprovechar para recordar a los medios de comunicación que por solicitud de las agencias que representan a los oradores participantes en nuestra Convención y con base en los contratos celebrados, no está autorizado grabar ni retransmitir sus intervenciones por cualquier medio, ya sea cámaras, grabadoras o celulares de manera parcial o total.

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